Para los allegados de Luisa Fernanda Pacheco Peralta todo ha sido devastador por su muerte.

Una joven que apenas estaba empezando a vivir y con un gran futuro murió el día anterior en la Clínica Portoazul tras haber caído el pasado 14 de septiembre en una alcantarilla de unos 7 metros de profundidad.

"Ella el miércoles estaba en el Corredor Universitario con una prima viendo cuarto de milla y cuando venía caminando cayó en la alcantarilla. Inmediatamente sus acompañantes llamaron a la ambulancia y al final la rescataron los bomberos. El rescate duró dos horas", contó Belkys Montañez, prima de la joven.

La joven, según precisaron los allegados, tenía solo fractura de tibia y peroné, por lo que debía ser sometida a una cirugía.

No obstante, su estado de salud empezó a desmejorar tras la cirugía y, al parecer, la bella joven adquirió una bacteria en el centro asistencial, lo que originó que se complicará más.

Según familiares, a la joven la sometieron a una amputación de su pierna y precisaron que pudo haber una presunta negligencia médica.

"Para operarla se tuvo que pagar 6 millones de pesos a pesar que mi prima tenía EPS y medicina prepagada. Se operó solo hasta el sábado en la tarde porque siempre aplazaban el procedimiento. Ella no soportaba tanto dolor y el lunes llegó el médico a verla tras la operación y dijo que el olor fétido que salía de su pierna y las ronchas era normal. El martes tuvieron que someterla a otra cirugía y le amputaron la pierna, pero se descompensó más y ayer murió", contó la prima.

La familia no descarta acciones legales por la presunta negligencia médica.

Luisa Fernanda estudiaba tercer semestre de ingeniería industrial en la Universidad Libre.

El cuerpo de la joven aún permanece en la clínica y su familia se encuentra en los trámites para la entrega del mismo.